Los días de gloria como actor quedaron atrás para Jude Larson. Ahora es un respetado productor con mucho dinero y escasa motivación para vivir. Su solitaria existencia cambia de pronto cuando contrata a un nuevo mecánico para su colección de coches de lujo.
Terry es bueno en su trabajo, pero es un joven rebelde, impertinente y rabiosamente atractivo. No tarda en convertirse en una obsesión peligrosa para el millonario. Un robo y una carrera ilegal le dan la excusa perfecta para ponerle la correa a su mecánico, de forma literal.
Cuando el pasado llama a la puerta despertando todos los miedos ocultos, su nuevo toy boy parece la única tabla de salvación para Jude.
Después de nuestra incursión en la fantasía con El sol cautivo, editada bajo los pseudónimos Leo Sango y Neith, y de estrenar nuestro pseudónimo para la erótica, Corelia Lane, con Las nueve virtudes del monje os traemos nuestra historia más subida de tono y pervertida. Tanto, que nos ha obligado a escribir un disclaimer.
Los días de gloria como actor quedaron atrás para Jude Larson. Ahora es un respetado productor con mucho dinero y escasa motivación para vivir. Su solitaria existencia cambia de pronto cuando contrata a un nuevo mecánico para su colección de coches de lujo.
Terry es bueno en su trabajo, pero es un joven rebelde, impertinente y rabiosamente atractivo. No tarda en convertirse en una obsesión peligrosa para el millonario. Un robo y una carrera ilegal le dan la excusa perfecta para ponerle la correa a su mecánico, de forma literal.
Cuando el pasado llama a la puerta despertando todos los miedos ocultos, su nuevo toy boy parece la única tabla de salvación para Jude.
Después de nuestra incursión en la fantasía con El sol cautivo, editada bajo los pseudónimos Leo Sango y Neith, y de estrenar nuestro pseudónimo para la erótica, Corelia Lane, con Las nueve virtudes del monje os traemos nuestra historia más subida de tono y pervertida. Tanto, que nos ha obligado a escribir un disclaimer.